Definición de la durabilidad para tres bienes de consumo básicos: la alimentación, el vestido y la vivienda
Se analizan los siguientes medios de consumo, esenciales para el desenvolvimiento de una sociedad: la alimentación, el vestido, y la vivienda.
Comenzando por la alimentación, se toman las necesidades de consumo de alimentos de un individuo como la expresada en una ración diaria, compuesta por cierta cantidad de alimentos. ¿Cuál es la durabilidad de este medio? Cada individuo necesita para existir una ración diaria de alimentos, con lo que la durabilidad de este bien es de un día. A diferencia de la durabilidad introducida para los medios de producción, expresada en la cantidad de los bienes que se obtienen con su participación, la durabilidad de los medios de consumo se expresa directamente en tiempo, y por ejemplo, para los alimentos, es conveniente hacerlo en días. Así la durabilidad de una ración diaria de alimentos, como bien lo indica su nombre, es un día. Cabe destacar que esta durabilidad depende de lo que la sociedad considera una ración alimentaria normal y que esta misma consideración de la norma puede verse sometida a variaciones de acuerdo a las circunstancias. La durabilidad así definida no tiene nada que ver con el plazo establecido para los productos en que estos han de consumirse.
Pasando al segundo medio de consumo mencionado, es decir el vestido, se estudia el caso de, digamos, una muda de ropa. Su durabilidad viene dada por el tiempo que ésta sirve al individuo. Ahora bien, una muda de ropa no se utiliza hasta su total desgaste. Existen convenciones sociales de hasta qué nivel de desgaste es normal llevar una muda de ropa. Es más, existen otros factores que influyen en el tiempo en que esta muda se lleva, como por ejemplo la moda. Pero para una sociedad dada, independientemente de que esta magnitud pueda expandirse o contraerse, en dependencia de la bonanza económica del momento, en un instante determinado existe un término medio de durabilidad de una muda de ropa, es decir, del tiempo en que esta se lleva hasta considerarla no apta para su posterior uso. Si se supone, por ejemplo, que por término medio, independientemente de cuan adecuado sea éste para expresar el uso de una muda de ropa por un individuo concreto, un individuo adquiere una muda de ropa cada seis meses, o dos veces al año y además, se sabe que una vez extraída del proceso de producción esa muda de ropa ya no vuelve a él, entonces se puede afirmar que el hecho de que esta muda de ropa pase a un individuo es equivalente a su destrucción, desde el punto de vista económico. Esto significa que su durabilidad es de medio año, o sea de aproximadamente 182 días.
Por último para analizar la vivienda y solo con el fin de poner un ejemplo se asume que ésta consiste en módulos familiares, cada uno de ellos ocupado por ejemplo por 4 personas, por término medio y que además una vivienda puede utilizarse normalmente por un período de 20 años, al cabo de cuyo tiempo se renueva. Ahora es más complejo calcular su durabilidad, puesto que un mismo bien sirve a más de un individuo. Partiendo de que cada 4 individuos necesitan de una nueva vivienda cada 20 años, tenemos que la necesidad de construcción de vivienda es una entre 4 individuos cada 20x365dias=7300 días. Es como si un cuarto de la vivienda durase 7300 días, o una vivienda completa 4×7300 días=29200 días.